Enoturismo de proximidad en Cataluña

El año 2020 nos ha salido muy extraño. En plena época de vacaciones, las restricciones sanitarias y de movilidad, nos invitan a redescubrir aquello que tenemos más próximo. Cataluña es una tierra de vinos, así que además de disfrutarlos en cada brindis, también podemos acercarnos a vivir la experiencia del vino desde los viñedos.

En el 2019 los ingresos del sector de la hostelería y el turismo supusieron el 15% del Producto Interior Bruto (PIB). La crisis sanitaria del coronavirus hizo que estos números cayeran en picado en el 2020, y a pesar de que se abrieran las fronteras exteriores de la Unión Europea desde el pasado 1 de julio, los viajes nacionales han disminuido un 11%.

Enoturismo en Cataluña

Toda esta situación ha hecho que se preste más atención a la necesidad de fomentar el turismo local. Moverte por Cataluña, descubriendo sus cocina, vinos y paisajes es un buen plan para estos tiempos donde hemos aprendido a dar prioridad a las actividades que nos dan tranquilidad y placer.

Barcelona

En Cataluña hay una gran variedad de bodegas y viñedos, con una amplia oferta de actividades y alojamientos. Un sencillo recorrido, y sin salir de la provincia de Barcelona, te permitirá descubrir las diferentes denominaciones de origen que hay en el territorio como las DO; Alella; Pla de Bages; DO Penedès y la DO Catalunya. En esta ruta puedes visitar también espacios considerados Bien de Interés Cultural, como el Monasterio de San Jerónimo de Murtra.

También puedes optar por la ruta de las Tinas, con construcciones de más de 150 años, o conocer Las Casas de Matamargó. Además, hay pequeños itinerarios como el Camino Paisajístico desde el núcleo de Sant Fruitós al Monasterio de Sant Benet; y la Ruta Miravinya.

Para conocer los diferentes paisajes del Penedès, te proponemos hacer un recorrido a través de cinco miradores con una arquitectura singular: La Cidera, El Circell, la Bardera, el Balcó y Sant Pau.

¿Eres una persona con espíritu explorador?, entonces puedes aventurarte por caminos de montaña hasta llegar a picos altos como el Puig de l’Àliga o el Montmell, entre otros.

Tarragona

Las denominaciones de origen de la provincia de Tarragona son: DOQ Priorat; DO Montsant; DO Terra Alta; DO Conca de Barberà; DO Catalunya y DO Tarragona. Aquí puedes optar por hacer rutas que van desde los aspectos más culturales, como la del modernismo de Reus, a las playas de la Costa Dorada, pasando por el Castillo de Escornalbou y la Ermita de Puigcerver. Pueblos como Siurana o Prades, también se merecen una visita.

Por otra parte, está todo el legado de la Tarraco Romana, así como las bodegas modernistas, el Monasterio de Santes Creus, el Santuario de Montserrat y la preciosa Catedral del Vi. Por último, se puedes hacer la ruta por la Ribera de Ebro, que incluye la Reserva Natural de Sebes o el Castillo de Miravet.

Lleida

Si prefieres desplazarte a la provincia de Lleida, podrás disfrutar de la DO Costers del Segre y la DO Catalunya, una zona con características geológicas y climatológicas cambiantes, que se reflejan en su paisaje y diversidad.

Vale la pena darse una vuelta por la Seu Vella, catedral del siglo XVIII de Lérida, y acercarse a gozar con la plenitud de la naturaleza en el Parque Nacional de Aigüestortes. Asimismo, el Castillo de Gardeny, los Humedales de Rufea, el Castillo de Saida, el Monasterio de Vallbona de les Monges y el Santuario de la Virgen del Salgar, son lugares de gran belleza e interés.

Girona

En Girona, te encontrarás con las DO Empordà y la DO Catalunya, y  una extensa oferta enoturística que puede combinarse con los paisajes de la Costa Brava.

La Ruta del Vino DO Empordà te adentra en una tradición muy arraigada en esta tierra, que se remonta a tiempos de los romanos. En Empúries hay ruinas para descubrir como el muelle griego (en excelente estado de conservación), del siglo IA.C., o los yacimientos arqueológicos donde pueden verse los vestigios de la historia del vino.

Por la zona no puedes dejar de disfrutar de la naturaleza y sus parques, como el de los Aiguamolls, el Parque Natural Montgrí, las isalas Medas y el Baix Ter.

Hacer enoturismo de proximidad ya sea para unas vacaciones relajadas o para una escapada, es una buena idea. Te permitirá comer de maravilla, conocer la diversidad del territorio a través de los vinos, la historia y la naturaleza que ofrece desde paisajes de montaña hasta los de playa.

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