Restaurante Rice, neurociencia y cocina se sientan a la mesa

Miguel Sánchez Romera es un médico argentino que lleva ya muchos años residiendo en Cataluña. Partiendo de este punto, no es difícil advertir que su carrera como cocinero es bastante atípica. Conocíamos su último libro Alimenta bien tu cerebro (Cúpula editorial) y nos despertó la curiosidad por experimentar en primera persona su cocina y, por supuesto, ver cómo compagina los fuegos con la neurología Nuestro deseo fue concedido y pudimos conocer cómo se creó el restaurante Rice.

Sánchez Romea no es nuevo en esto de la restauración, y ha sabido conjugar de manera sorprendente su formación universitaria con la pasión por la cocina, que también se convirtió en su profesión. Actualmente, además de comandar el restaurante de Barcelona sigue trabajando en temas de neurociencia aplicadas a la gastronomía, y realizando asesoramientos en diferentes partes del mundo como Estados Unidos (donde pasó un largo período de su vida) o en Asia.

A finales de la década de los 90, el crítico gastronómico Pau Arenós escribió un libro sobre los que consideraba los punteros en el ámbito de la vanguardia creativa, bajo el título Los genios del fuego. Allí estaban unos jovencísimos Jordi Roca; Carme Ruscalleda; Santi Santamaría; Carles Gaig y también Miguel Sánchez Romera.

Después de pasar varios años estudiando cocina de manera autodidacta, en 1996, Sánchez Romera abrió junto a Cristina Biosca (su mujer), el restaurante L’Esguard en el Maresme. Su cocina de vanguardia le valió una Estrella Michelin en poco tiempo (en la edición de la guía de 1999). A pesar de estar en lo más alto de la cocina moderna catalana, decidió cerrar el restaurante para explorar otros caminos, en los que seguía haciendo coincidir la cocina y la medicina.

Los derroteros llevaron a Miguel y Cristina nuevamente a Barcelona, para abrir el restaurante Rice. Allí se sirve comida saludable (pero sin tonterías de moda). El arroz tiene su protagonismo indiscutible (no en vano en nombre), pero donde las técnicas culinarias asiáticas y mediterráneas se mezclan a conveniencia. De todas maneras, hay que advertir que no se trata de un restaurante de “fusión”, sino de una cocina que es el resultado de experiencia culinaria, la ciencia y el conocimiento de diversas gastronomías.

Uno de los factores comunes que recorren esta personal propuesta es la utilización y combinación de colores (todos de origen natural) y formas (círculos, cuadrados, etc.). Asimismo, este juego forma parte de la ambientación del restaurante: zona amplias y espaciosas (tienen un reservado para 20 personas), paredes blancas y suelo negro, con cuadros y proyecciones que enredan formas y colores, y recuerdan a algunos de los test utilizados en las ciencias cognitivas.

La carta del restaurante está compuesta por diferentes menú cerrados, a las que se denominan “Composiciones de sabor”. Las opciones comienzan a partir de 25€ (al mediodía) con una selección de entrante, platos principal, postre y bebida, y luego hay cinco composiciones diferentes (hasta 69€). Sólo se trabaja con productos frescos de temporada, así que los menú van cambiando.

En todos los menú hay arroces en diferentes elaboraciones, como los atractivos Barcelona Roll (makis) de pescados y verduras. coloreados con ingredientes naturales. Aunque los menú son cerrados, adaptan la oferta en función de alguna intolerancia alimentaria.

Cuando Los Foodistas estuvimos en el restaurante Rice tomamos un menú que se abría con un pequeño entrante de puré de berenjena, con tomate seco y aceite de oliva (estaba tan bueno que nos lo hubiéramos pedido un ración en formato XL); los Barcelona Roll; salmón ahumado (en la casa) con queso fresco y vegetales crudos. El arroz del día, fue uno negro con alga kombu, gambas y sepia; muy sabroso, con profundo sabor marino, y en el punto justo. Para el plato principal, una coquelet tiernísima confitada a fuego lento, con anís y verduritas.

La cocina de Sánchez Romera no es exhibicionista, aquí la ciencia ocupa un lugar diferente a lo que puedes esperar el los restaurantes que se presentan como adalid de la neurograstronomía. Vale la pena ir a disfrutar de su buena y honesta comida y, si descubres algunos de los twist científicos que permiten la “facilitación” los procesos de percepción, aun será más divertido.

Restaurante Rice: c/ Muntaner 182 (08086) Barcelona
Horario: martes de domingos de 13 a 15:30h /miércoles a sábado de 20 a 22:30h.
Más información en su Web

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