Pla Restaurante, una cocina con raíces

Publicado el 06.09.2016


El Restaurante Pla es un sitio consolidado de Barcelona, su cocina mezcla sabores mediterráneos, ingredientes de temporada, Km 0 y ecológicos, con una técnica que eleva los platos a un nivel alto. Aquí sobresale el respeto por el producto y la atención profesional.

Foto Godo Chillida para LosFoodistas©

Carpaccio de Daikon / Foto Godo Chillida para LosFoodistas©

Situado en el corazón de la ciudad de Barcelona, justo detrás del Ayuntamiento, el restaurante Pla es un sitio que a los locales, podría pasarles desapercibido. La zona está llena de bares y restaurante pensados para turistas, por lo cual, a priori, cualquier vecinxs de la ciudad evitaría sentarse a la mesa de un restaurante ubicado en ese lugar. Sin embargo, aquí falla el sentido común…

Berenjena al vapor con pure de alubias / Foto Godo Chillida para LosFoodistas©

Inaugurado en 1998, el Restaurante Pla lleva casi 20 años abierto en el Gótico barcelonés, mucho antes de que el barrio se convirtiera en un hervidero de viajerxs. El timonel de este barco es Jaume Pla, dueño también de otros emprendimientos gastronómicos en la misma zona, y con idéntica forma de trabajo. En Pla se respira un ambiente cálido, distendido, con luz tenue y decoración con encanto. Hay muchos rincones que invitan a una cena íntima y otros, para compartir con amigxs. En las mesas hay pequeños arreglos con hojas secas naturales, piñas, trozos de madera. De alguna manera, estos adornos anticipan lo que encontrarás en los platos, porque la naturaleza será una constante.

La carta es corta y, en un primer vistazo parecería que los platos son muy simples. No obstante cuando llega la comanda a la mesa, esa percepción se desvanece porque detrás de la sencillez hay un gran trabajo de elaboración técnica y mucha creatividad. Por otra parte, la oferta gastronómica se centra en algo que es cada vez más una tendencia: la disminución del protagonismo de las proteínas animales. Aquí los vegetales están muy elaborados (lo que no significa cocinados hasta dejarlos ‘blandurrios’ y sin sabor), y reciben un tratamiento estrella, como el bulbo de hinojo del menú degustación, que cierra la comida ocupando el lugar que tendría la carne roja.

El irlandés Andrew Smith es el jefe de una cocina en la que se refleja un buen conocimiento de lo local y también un gusto viajado. Él sabe sacar el máximo provecho de las hortalizas, verduras, frutos secos y legumbres, potenciando sabores y respetando los ingredientes originales, con toques de salsas, especias y otras elaboraciones, que crean puntos de contraste o de fuerza.

El restaurante Pla es un sitio para sorprender el paladar, y por ello nos entregamos a la experiencia. Decidimos pedir diferentes platos de la carta (algunos de ellos también presentes en el menú degustación). El entrante puso bien alto el listón: una hoja de puerro con cebolla confitada, alga Kombu frita y ajo negro, que hizo que metiéramos la mano en el plato para comer hasta la última miga. Crujiente, lleno de puntos de sabor (balsámico, amargo, dulce). Una munición de texturas y gustos que se van abriendo en racimo. La gamba con flor de puerro salvaje, ofició de puente entre los tres primeros platos, con sabores que adquirían potencia poco a poco.

Salmón con hinojo y espuma de agua de mar / Foto: Godo Chillida para Los Foodistas©

Encontrarse con el Carpaccio de Rábano Daikon con puré de alcaparras y pasas, oliva verde y piñones tostados, es abandonarse al placer gustativo. Sí señora, sí señor, un simple rábano de Daikon da para mucho más que una decoración de un plato de sushi. Cada bocado que te llevabas a la boca, iba descubriendo los sabores aportados por las alcaparras, aceitunas, etc. Desde el punto de vista de Los Foodistas, este es un plato que no deberías saltarte.

Tomamos también unos dumpling de verduras y el huevo de corral a baja temperatura (cocinado a 65º), con setas shimeji salteadas, hierbas, caldo de puerro y jamón ibérico. Otro de los platos de vegetales que nos sorprendió fue la berenjena al vapor, puré de alubias, hierbas y curry en espuma. Los Foodistas tenemos un amor especial por las verduras en general y las berenjenas en particular, pero eso no condiciona la apreciación sino que nos vuelve más exigentes, puesto que tenemos bocas adiestradas en su degustación. En este caso, la preparación dista años luz de lo que te puedas imaginar por ‘berenjena al vapor’, además las especias levantan cada uno de los matices del plato.

La carne de nuestra cena vino desde el mar, pero sin dejar la huerta de lado. Salmón pochado en oxalis (también conocido como ñame), hinojo y limón salado. Un plato muy salino (que no salado), reforzado por una espuma de agua de mar, una salsa de limón salado y unos germinados de eneldo. Resumidamente: un escándalo de presentación, gusto e idea.

En Pla, todo lo que se pone sobre la mesa se luce. Por supuesto, que la pastelera hizo lo propio: un postre de chocolate, con un toque de té verde matcha y sésamo garrapiñado; un cremoso de albahaca y bizcocho de aceite de oliva virgen, cerraron la comida por todo lo alto.

Foto Godo Chillida para LosFoodistas©

Un postre sorprendente: Cremoso de albahaca y bizcocho de aceite de oliva virgen extra / Foto Godo Chillida para LosFoodistas©

Tal vez el maridaje merecería una nota aparte. Básicamente nos dejamos caer en  las manos de Damien Aubry, el Jefe de Sala. titulado en Sumilleria en el CETT y Master Sommelier Advanced. Esa fue una gran decisión, y por ello nuestra segunda recomendación imprescindible. Damien, es francés y tiene una sólida experiencia internacional en Inglaterra, Irlanda, Suiza, Argentina y África .

La carta de vinos y el cuidado que se les dispensa, sigue la misma línea de trabajo que la cocina. Los maridajes que propone te llevan de viaje entre caldos catalanes, españoles, italianos, alemanes o franceses. Hay vinos de elaboración tradicional, naturales y biodinámicos. Durante la cena tomamos medias copas, con una temperatura de servicio impecable (más para un caluroso día de verano). Pasamos desde un Moscato seco de Alicante (con mucho aroma a Lychee y uva madura), un Cabernet Souvignon (con toques de especias y largo recorrido), hasta un vino sorprendente de DO Madrid (redondo y untuoso, que contrastaba bien con los platos). Cerramos un vino francés de Botritis natural (de 2002), bio y sin aditivos. En fin, no dejaremos de repetir que Damien puede orientarte muy, además de sorprenderte.

Los martes es el día en que Pla ofrece música en directo (y ese fue el día de la semana que nosotros fuimos), así que disfrutamos de un dúo que amenizó la velada, aportando un punto más a esta gran experiencia gastronómica que representa Pla Restaurante.

Información

Además de la carta, hay menú degustación de 7 platos con lo más representativo de su cocina por 52 € IVA incluido. El maridaje (recomendado), sumo 20€ más a la cuenta final.
Es recomendable reservar mesa.

C/ de la Bellafila, 5 (08002) Barcelona


Telf. +34 934 126 552

Horario de Lunes a Jueves y domingo de 19h a 23 h. Viernes, Sábado y vísperas de festivo de 19 h a 00:00

Si quieres ver más fotos de los platos, vino y el ambiente de Pla, aquí tienes nuestro álbum.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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